ESPAÑA Y FRANCIA EN EL SIGLO XVI

 

LA ESPAÑA IMPERIAL: CARLOS V Y FELIPE II

“España bajo el gobierno de los Austrias Mayores.
Tan solo un año antes de que Lucero clavara sus 95 tesis en la puerta de la Iglesia de Wittenberg, en España fallecía el rey Fernando apodado ‘el Católico’. Su trono fue heredado por su nieto Carlos de Habsburgo, hijo de Juana ‘la Loca? Y de Felipe ‘el Hermoso’, muerto en 1506.
El nuevo rey, coronado con el nombre de Carlos I, fue recibido fríamente por los españoles, ya que no hablaba el castellano y desconocía las costumbres ibéricas. Tres años después, la desconfianza de los españoles se incrementó cuando el rey partió hacia el Sacro Imperio Romano Germánico para ser coronado emperador luego de la muerte de su abuelo paterno Maximiliano I. Así, Carlos I de España se convirtió en Carlos V y gobernó desde entonces vastos dominios que incluían Austria, los Países Bajos, España, Cerdeña, Sicilia, Nápoles y las colonias americanas.
Durante su reinado, Carlos V debió enfrentar grandes desafíos, pues las malas comunicaciones, las inevitables delegaciones del poder real en virreyes y diversos consejos y las diferentes nacionalidades que componían un imperio muy extenso fueron un obstáculo para la centralización de la autoridad monárquica. Además, debió realizar importantes gastos en el mantenimiento de su aparato burocrático, y más aún en el de su ejército. Esto se debió a las constantes guerras que tuvo que librar para mantener las fronteras del imperio frente a las amenazas de los reyes franceses, los príncipes alemanes que abrazaron la religión luterana y el Imperio Turco Otomano, cuya expansión llegó hasta las puertas de la ciudad de Viena.

EL IMPERIO DE FELIPE II

En 1556, Carlos V abdicó. Entregó entonces la corona del Sacro Imperio [junto a la herencia de Maximiliano de Habsburgo] a su hermano Fernando y delegó el trono español a favor de su hijo Felipe. Coronado como Felipe II, este monarca se propuso mantener la unidad de su imperio y detener el avance del protestantismo. Así que, al igual que durante el reinado de su padre, las campañas militares fueron constantes y representaron el principal gasto de la Corona. Esas guerras, que lo enfrentaron contra  los franceses, los turcos, los ingleses, los portugueses (Felipe anexó su Imperio en 1580) y los holandeses (se rebelaron contra su autoridad) estuvieron motivadas tanto por las ambiciones expansionistas como por los conflictos entre católicos y protestantes.
Con el fin de solventar los enormes gastos que implicaba sostener un imperio tan extenso, Felipe II recurrió a los préstamos de los banqueros extranjeros. Sin embargo, también pudo contar con los metales preciosos obtenidos de los dominios españoles en América. Gracias a la plata extraída de Potosí y de Zacatecas, el monarca pudo ver aliviada la situación de sus exhaustas arcas y, a su  vez, acceder a nuevos préstamos externos, con la promesa de abonarlos con lo que produjeran esas minas en el futuro.
LAS GUERRAS EN FRANCIA: RELIGIÓN Y POLÍTICA
Durante la segunda mitad del siglo XVI, Francia padeció una serie de conflictos y levantamientos armados, originados en las diferencias entre católicos y hugonotes, como se llamaba allí a los protestantes. Estos enfrentamientos pusieron en evidencia la creciente debilidad de la monarquía y su incapacidad de controlarlos. Pero también dieron cuenta de una realidad política sumamente compleja. Por un lado, de las luchas por el poder entre los nobles franceses, divididos en dos grandes  bandos: los GUISA, católicos y de gran influencia sobre la corona, y los BORBONES, inclinados a la causa protestante y ligados a la corona de Navarra, que aún no había sido incorporada a España. Por otro, del papel que jugaron los pobres, los trabajadores urbanos y los campesinos en las revueltas y los levantamientos de esos años. Aunque justificados por razones religiosas, estos episodios eran una forma de intentar poner un límite a las injusticias a las que eran sometidos estos sectores, actuando por mano propia cuando las autoridades no lo hacían.
LOS NOBLES SE ENFRENTAN: LAS GUERRAS DE RELIGIÓN
Cuando en 1560 falleció el rey católico FRANCISCO II de Valois, debía sucederle en el trono su hermano, quien por entonces tenía sólo diez años. Debido a su corta edad, se hizo cargo del gobierno la madre de ambos, CATALINA DE MEDICI, mujer culta y educada, que intentó conciliar las diferencias entre católicos y protestantes. Así, en 1562, dio a conocer un edicto que otorgaba ciertas libertades a los hugonotes. Como era de esperarse, el sector encabezado por los GUISA reaccionó llevando a cabo una cruel matanza de protestantes, que dio inicio a una serie de ocho guerras que finalizaron recién en 1598. Prontamente, la guerra en Francia se transformó en un conflicto de carácter internacional, ya que los Guisa se unieron a la LIGA SANTA, católica e integrada por Felipe II y el Papado. Los hugonotes, por su lado, formaron la UNIÓN CALVINISTA, y recibieron ayuda financiera de la reina Isabel I de Inglaterra.
En 1570, católicos y protestantes pactaron una tregua, que establecía para los hugonotes la libertad de practicar su culto en todo el territorio francés con excepción de París. Pero esta paz tampoco fue duradera, ya que en agosto de 1572 grupos armados católicos asesinaron a alrededor de 3000 nobles protestantes que habían acudido a París a presenciar la boda de la hija de Catalina de Medici, la princesa Margarita, con el jefe hugonote Enrique de Navarra. A este hecho se lo conoce como ‘MATANZA DE SAN BARTOLOMÉ’.
Fue recién bajo el reinado de ENRIQUE IV, fundador de la dinastía de los Borbones, cuando la monarquía francesa recuperó la autoridad perdida y se pacificó la nación. Es que Enrique de Navarra, que era hugonote, decidió convertirse al catolicismo y promulgar, en 1598, una ley (el EDICTO DE NANTES) que permitía a los protestantes profesar libremente su culto, participar en la vida política y conservar bajo su poder La Rochella y otras plazas fuertes (es decir, ciudades amuralladas) del sudoeste de Francia.” (x)

(x): “América Latina y Europa entre los siglos XV y XVIII”, Santillana, Buenos Aires, pags.80 y 81

 

CONSIGNAS:

1-¿Cómo llegó Carlos al trono español?

2-a)¿Qué territorios comprendía el Imperio de Carlos V? ; b)Marcá ese imperio en una mapa de Europa 

3-a)¿Qué problemas enfrentó Carlos V durante su reinado? ; b)PARA INVESTIGAR: ¿Qué hizo Carlos luego de renunciar?

4-Resumí el texto titulado "El Imperio de Felipe II"

5-¿Por qué estaba dividida la sociedad francesa en el siglo XVI?

6-Explicá las Guerras de Religión

7-¿Cómo terminó Enrique IV con los conflictos internos franceses?

8-Enrique IV pertenecía a la dinastía borbónica. ¿Gobiernan hoy los Borbones algún país?