domingo, 9 de agosto de 2020

UN MUNDO DESCONOCIDO POR LOS EUROPEOS:


Mapa de Claudio Ptolomeo (o "Tolomeo" a secas) del 150 d.C. 
Influyó mucho sobre Colón y otros navegantes

“Hacia el siglo XII, la gran mayoría de los europeos sabía poco y nada sobre los diferentes territorios que conforman el planeta. Algunos simplemente conocían que, en tierras lejanas, existían grandes imperios cuyos finos productos, como la seda y las porcelanas, eran adquiridos por nobles y burgueses. Otros asociaban el nombre de las Indias con especias aromáticas, como la nuez moscada o el azafrán, y con las conservantes, como la pimienta. Pero no sabían, exactamente, de dónde provenían esos productos o cuál era la ubicación geográfica de los reinos asiáticos que los cultivaban. Menos aún sabían de las civilizaciones africanas, a excepción de las ubicadas en el norte del continente, con las que tenían contactos. Y, por supuesto, desconocían por completo la existencia de América.

A pesar de este desconocimiento sobre la forma, la composición y las dimensiones de la Tierra, las Cruzadas y el desarrollo del comercio con Oriente ayudaron a que las noticias sobre los reinos y los imperios de Asia y del norte y del centro de África fueran cada vez mayores. Así, entre relatos legendarios, crónicas de misioneros cristianos y observaciones de viajeros y comerciantes, los sectores cultos de Europa comenzaron a saber más sobre aquellas sociedades y sus riquezas. Sin embargo, recién en los siglos XV y XVI los habitantes del continente europeo empezaron a entender que el mundo era mucho más vasto y complejo de lo que sus antepasados habían creído durante siglos.


RELATOS DE COMERCIANTES Y VIAJEROS


Uno de los relatos que describían a las sociedades asiáticas , sus costumbres, sus gobiernos y sus formas de vida fue el que en el siglo XIII escribió Marco Polo. Este comerciante veneciano viajó a través de la llamada “Ruta de la Seda” y residió varios años en la corte del mongol Kublai Khan, en la actual China[…] . La ruta de la seda tenía alrededor de 4.000 kilómteros, atravesaba vastas y peligrosas regiones del Asia Central, y unía China con Constantinopla, la capital del Imperio Bizantino.

A lo largo de este camino terrestre, diversos comerciantes transportan seda, pieles, té y especias aromáticas, que intercambiaban por plata, oro, piedras preciosas y lanas.”(1)



 Ruta de la Seda

UN OBSTÁCULO EN EL CAMINO: LOS TURCOS


“Las rutas comerciales terrestres que los europeos habían utilizado desde el siglo XII, como la Ruta de la Seda, eran peligrosas y demasiado costosas. Uno de los principales problemas eran las grandes distancias que debían recorrer los mercaderes. Esto hacía que los emprendimientos comerciales fueran muy costosos y limitaban, en gran medida, la cantidad de productos que podían trasladarse a Europa. Por otro lado, existían serios riesgos a lo largo del camino, ya que las caravanas podían ser atacadas por bandas de asaltantes y ladrones. Además, los comerciantes debían pagar tributos y peajes diversos a cambio de salvoconductos que les permitían atravesar sus territorios, con lo cual aumentaban los costos del transporte.

Durante el siglo XV, los comerciantes europeos debieron afrontar una situación aún más compleja: el creciente control de los turcos otomanos sobre las redes comerciales. Mientras extendían la fe musulmana, los otomanos, que en el 1300 habían creado un poderosos imperio en Asia Menor, iban fortaleciendo vínculos comerciales y concentrando en sus manos el mercado de las especias. Así, en cualquier lugar hacia donde las caravanas comerciales se dirigieran, debían negociar con los mercaderes musulmanes las condiciones para el intercambio.


DIFÍCIL PERO NO IMPOSIBLE


Frente a estas limitaciones y a los crecientes peligros que implicaba el comercio en los antiguos caminos terrestres, acaudalados comerciantes y algunos reyes europeos, como los españoles y los portugueses, comenzaron a pensar en la posibilidad de financiar expediciones que buscaran rutas comerciales alternativas. Estas rutas, que debían eludir a los turcos otomanos y conectarlos directamente con los reinos que producían las especias, se abrían paso a través del océano Atlántico.

Aunque la idea era arriesgada, existían claros indicios que mostraban que no era imposible. Entre los sectores cultos europeos, por ejemplo, ya circulaba la idea de que la Tierra era redonda. Esto les permitía pensar que si una expedición partía de un punto determinado del planeta, podía navegar en línea recta sin riesgo de caer en el vacío, y volver al punto de partida por el lado opuesto. Además, la introducción de antiguas obras de geografía romanas y árabes, con sus mapas y observaciones, daban cuenta de la posibilidad de alcanzar las llamadas ‘Indias’ por mar.” (2)



 Los errores de los mapas europeos


LOS AVANCES TÉCNICOS Y TECNOLÓGICOS QUE PERMITIERON LAS EXPLORACIONES


Los europeos del siglo XV utilizaron para avanzar en sus exploraciones mapas llamados PORTULANOS, en los cuales se dibujaba el litoral marítimo y se ubicaban los puertos y las distancias entre ellos.

En Europa se estaban leyendo nuevamente obras de geógrafos antiguos, como Claudio Ptolomeo, y Pierre d’Ailly, de la etapa final de la Edad Media.

Ptolomeo había escrito en tiempos del Imperio Romano obras de geografía y astronomía con descripciones y mapas, mientras que el francés d’Ailly citaba en sus obras conocimientos geográficos de griegos, latinos y árabes. Si bien estos mapas tenían muchas imprecisiones (como unir el sur de África y de Asia con la Antártida, transformando al Océano Indico en un mar interior) abrían la posibilidad de una ruta marítima a las Indias.

Para emprender estas exploraciones, los navegantes contaban, al menos en el hemisferio norte, con el conocimiento de la Estrella Polar, que al ubicarse siempre sobre el Polo Norte permite fijar la latitud. Pero esta estrella no es visible al sur del Ecuador. Este problema podía resolverse, con una brújula, aparato dotado de una aguja magnetizada que apunta siempre hacia el Norte.

Otro avance muy importante fue la aparición de embarcaciones más seguras y fáciles de manejar. Las galeras medievales eran útiles en el Mediterráneo, pero tenían muchas limitaciones para hacerlo en las aguas mucho más peligrosas del Océano. 
Carabela


Las nuevas naves con las que contaban españoles y portugueses, llamadas “carabelas”, estaban “provistas de sólidos cascos, con velas cuadradas y triangulares (conocidas como ‘latinas’), los navegantes portugueses fueron llegando a lugares de África antes desconocidos, y se animaron, con el paso del tiempo, a destinos más inhóspitos en su  búsqueda de las Indias”. (3)


EL DESARROLLO DEL COMERCIO Y LA EXPANSIÓN ULTRAMARINA



“El cambio más notable  que se produjo en los siglos XV y XVI fue la expansión comercial y territorial de Europa. La expansión que habían iniciado las ciudades algunos siglos atrás, desde el siglo XI, tomó un nuevo impulso.



El florecimiento de los negocios permitió la consolidación, entre los burgueses, de un grupo particular: la burguesía comercial. Estaba constituido por hombres enriquecidos por la compra-venta, el préstamo de dinero a interés o la producción de manufacturas. Estos mercaderes y banqueros, junto con los maestros de los gremios, conformaban el grupo privilegiado de las ciudades europeas. En una sociedad cada vez más dinámica, también comenzó a tener importancia el grupo de los profesionales, en especial los médicos y los abogados.” (4)


LA IMPORTANCIA DE LAS ESPECIAS EN EL SIGLO XV


“Las comunidades agrícolas de Europa padecían una falta permanente de forraje de invierno para alimentar al ganado. Gran cantidad de animales tenían que ser sacrificados cada otoño, y su carne conservada para el consumo invernal, salándola o adobándola. De ahí la constante e inagotable demanda de especias para el condimento y la conservación. La sal era el preservador más común y barato, y mucha de la provisión de sal de la Europa Occidental provenía de Portugal. Aparte de la sal, las especias preservadoras se producían todas en los países tropìcales: la pimienta en la India, la canela en Ceilán, la nuez moscada y el macis en Célebes. El jengibre es un producto chino. El clavo, la más preciada de las especias, venía de las islas Molucas.

Para completar la lista de mercancías orientales hay que nombrar otros productos que alcanzaban altos precios en Europa y que venían por las mismas rutas: seda de China, tela de algodón y esmeraldas de la India, rubíes del Tíbet, zafiros de Ceilán y ruibarbo de China, muy apreciado en medicina” (5).



NOTAS:

(1): Morichetti, Pyke y Pita: “América Latina y Europa entre los siglos XV y XVIII”, Santillana, 2007, pag.43

(2): Morichetti, Pyke y Pita: “América Latina y Europa entre los siglos XV y XVIII”, Santillana, 2007, pag.45

(3): Morichetti, Pyke y Pita: “América Latina y Europa entre los siglos XV y XVIII”, Santillana, 2007, pag.47

(4): Alonso, Elisalde y Vázquez: “Europa Moderna y América Colonial”, Aique, p.27

(5): John H. Parry: “Europa y la expansión del mundo (1415-1715)”, FCE, primera edición 1952, se ha seguido reeditando hasta 2014.

CONSIGNAS:
1- A)¿Qué sabían y qué desconocían los europeos del siglo XV sobre como era el mundo?; b)¿Cuáles eran sus fuentes de información?
2- ¿Qué era la Ruta de la Seda?
3- ,¿Cuál fue el rol de los turcos otomanos en este proceso?
4- ¿Por qué dice el texto que la idea de navegar al Oeste para llegar al Este era "difícil pero no imposible"?
5- ¿Qué errores observás en el mapa de Tolomeo? -Observá sobre todo las tierras que rodean el Océano ïndico-
6- ¿Por qué en tiempos de Colón la navegación Oceánica era más sencilla que algún tiempo antes?
7-Enumerá los productos orientales que interesaban a los europeos y los lugares de los que procedían.


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