Luis XIV, rey de Francia durante 72 años...
El siglo XVII protagonizó un gran desarrollo científico, con
la aparición de astrónomos como el italiano Galileo Galilei (1564-1642) y el
alemán Johannes Kepler (1571-1630), que continuaron con los avances respecto al
sistema solar que había comenzado en el siglo anterior Nicolás Copérnico.
Galileo
Pero, pese a los avances, va a ser una época de mucho
fanatismo e intolerancia, en el cual las guerras por cuestiones religiosas van
a ensangrentar a países como Francia y Alemania, y a generar traslados masivos
de pobladores que buscaban un lugar para vivir donde no se los persiguiera por
su fe.
Fue el siglo de la decadencia española, a pesar de los
intentos (fracasados) de revertirla por parte del Ministro principal de Felipe
IV, el Conde-Duque de Olivares.
Ante el menguante poder español, comenzaron a fortalecerse
Inglaterra y Francia.
Esta última en particular será la gran potencia de siglo,
primero por la figura del Cardenal Richelieu, poderoso ministro de un débil Luis
XIII, y luego por la aparición del llamado “Rey Sol” o “Luis el Grande”, quien
gobernaría por 72 años (1643-1715).
En la Francia de este poderoso Luis XIV surgieron tanto el absolutismo
como el mercantilismo, las dos teorías, una política y la otra económica, que
caracterizan al siglo.
EL ABSOLUTISMO Y LA
TEORIA DE BOSSUET:
El teólogo y jurista francés Jacobo Bossuet (1627-1704)
justificó con gran claridad, en su obra titulada Política sacada de las propias
palabras de la Sagrada Escritura, la teoría política del Absolutismo:
“Dios establece los
reyes como sus ministros, y reina mediante ellos en los pueblos. Ya hemos visto
que todo el poder viene de Dios para el bien: Temblad si caéis en el mal; no en
vano tiene la espada, y es ministro de Dios, y son [los reyes] sus lugartenientes en la Tierra. Mediante los
reyes ejerce [Dios] su imperio [...] Resulta de todo esto que la persona de los
reyes es sagrada, y atentar contra sus vidas es sacrílego".
LAS MONARQUIAS ABSOLUTISTAS:
En la Edad Media y hasta aproximadamente el siglo XV-XVI, el
Papa, considerado como el único representante de Dios sobre la Tierra,
intervenía en la política europea, limitando el poder de los reyes. Los reyes
católicos de la Baja Edad Media temían enemistarse con el Papado, que podía
generarles muchos problemas en su reino. Pero justamente a fines de la Edad
Media, se produce un proceso de creciente desprestigio del Papado, debido a su
intromisión continua en disputas políticas e incluso en conflictos militares.
Ya en el siglo XVI,
en tiempos de Carlos V, se observaban claros rasgos de este desprestigio papal
entre los príncipes católicos. El propio Carlos V de Habsburgo, católico y
defensor de la Iglesia frente a los luteranos, debió enfrentar en una guerra al
Papa al comienzo de su reinado; no sólo eso sino que el ejército hispano-alemán
que respondía a las órdenes de Carlos ocupó la ciudad de Roma y obligó al Papa
a abandonar el Vaticano y a refugiarse en un castillo mientras los soldados del
rey español saqueaban la ciudad eterna.
Estos cambios se
llevaron a la teoría política en el siglo XVII, al surgir la doctrina de la
“monarquía de derecho divino”, origen del sistema de gobierno conocido como
“Absolutismo”. Siguiendo esta teoría, los reyes se consideraban como
representantes directos de Dios sobre la tierra. Por lo tanto, no debían rendir
cuentas de sus actos ante nadie, ni siquiera ante el Papa o la Iglesia.
Apoyándose en esta
teoría, los reyes incrementaron la centralización del sistema administrativo
afianzando la autoridad de la burocracia real, y sometieron a la nobleza, las
ciudades, los funcionarios y la iglesia a su autoridad directa, profundizando
el proceso de conformación de un Estado-nacional.
El más exitoso
representante del Absolutismo fue el rey francés Luis XIV (1643-1715), casi un
símbolo del mismo. Luis XIV resumió su concepción sobre el absolutismo con una
frase que se hizo famosa : “L’Etat c’est moi” (“El Estado soy yo”), con lo que
dejaba claramente establecidas las bases del poder personal casi absoluto del
monarca.
EL MERCANTILISMO O COLBERTISMO: DOCTRINA ECONÓMICA DEL SIGLO
XVII :
El siglo XVII se
caracterizó por una política económica propia: el mercantilismo o colbertismo .
El mercantilismo fue “inventado” por Jean-Baptiste Colbert, ministro del rey
francés Luis XIV. Según la concepción mercantilista, un país se enriquecía
acumulando oro y plata a través del comercio. Como los metales preciosos eran
escasos, el enriquecimiento de un país determinaba –en opinión de los
colbertistas- el empobrecimiento de otros. Para enriquecerse, un país debía
adoptar una política proteccionista, importando lo mínimo indispensable, y
exportando lo máximo posible.
Para incrementar las
exportaciones de un país era necesario contar con una industria desarrollada.
La industria requería, para su desarrollo, de abundante mano de obra y de
diversas materias primas. Por ello, los mercantilistas buscaban dotar a su país
de una población numerosa, lo que les brindaba una abundante cantidad de
trabajadores. En segundo lugar, necesitaban transformar en colonias a los
países que producían materias primas vitales para la industria europea o
metales preciosos exportables. Por otra parte, según las doctrinas
mercantilistas, las colonias se transformaban en “mercados cautivos” de los
productos de la metrópoli, ya que cada estado europeo cerraba sus colonias al
comercio de otras naciones (estableciendo
monopolios comerciales, como el sistema español de “Flotas y Galeones”).
Finalmente, Colbert
afirmaba que para mejorar el comercio de un país –y por ende también su
riqueza- era necesario poseer una flota mercante nacional.
La teoría económica
mercantilista impulsó a los países europeos a continuas guerras por el control
de las colonias, los mercados y las rutas comerciales. Al respecto, afirmaba el
propio Colbert:
“Sólo es posible acrecentar el comercio empleando los barcos
del propio país, y aumentando su número.
Este incremento sólo puede lograrse mediante el descubrimiento de alguna nueva
oportunidad comercial, hasta ahora ignorada, o mediante la disminución del
número de barcos de alguna de las demás naciones. El descubrimiento de este
nuevo comercio en muy incierto [...]. Es necesario, pues, que se realice
mediante la disminución del número de naves de alguna de las otras naciones
[...].
Corresponde agregar que el comercio provoca una batalla
perpetua en tiempos de paz, y guerras entre las naciones de Europa, en torno de
quien obtendrá la mejor parte del mismo [...]”*
*Tomado de : Lettres, instructions et mémoires de Colbert,
Pierre Clément editeur, Paris, 1873,vol. VII
CONSIGNAS :
1- PARA INVESTIGAR: ¿Qué aportes científicos hicieron COPÉRNICO, GALILEO y KEPLER?
2- ¿Cuál era, para Bossuet, el origen del poder de los reyes?
3- ¿Cómo cambió en rol político de los papas en los siglos XVI y XVII?
4- Explicá a qué se llamó absolutismo y qué características tenía.
5- Buscá una breve biografía de Luis XIV.
6- Comentá la frase de Bossuet, explicando cuáles eran sus
consecuencias políticas.
7- Explicá cómo se alteró la relación de poder entre el Papa
y los reyes en la Europa de los siglos XVI-XVII
8- Elaborá un Cuadro Sinóptico que explique las
características principales de la teoría económica mercantilista.
9-“Directa o indirectamente, el mercantilismo generó
infinidad de guerras y conflictos en la Europa de los siglos XVII-XVIII”. SI-NO
¿Por qué?
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