A comienzos del año 1789, buena parte de Europa estaba gobernada por monarcas que sostenían que su autoridad provenía directamente de la voluntad divina. Ellos pensaban que la soberanía originalmente residía en Dios, quien, a su vez, la delegaba en los reyes que, por esta razón, se llamaban ‘soberanos’. A pesar de ser depositarios de la soberanía, los reyes encabezaban estados cuya administración era caótica y fragmentada, y donde las resistencias de los nobles y otros privilegiados habían frenado los intentos de centralización. Los soberanos podían hacer muy poco para eliminar totalmente las resistencias de los nobles , a causa de una situación contradictoria: por un lado, los nobles, temerosos de perder su poder, se convertían en rivales de los reyes cuando frenaban sus intentos de centralizar la autoridad y la administración del Estado; por otro, los nobles eran un elemento fundamental en la sociedad aristocrática basada en las desigualdades y en los privilegios legales, en la cual los reyes se encontraban en la cima.
Durante los siguientes sesenta años, las monarquías europeas y el tipo de sociedad que defendían enfrentaron impugnaciones formidables y constantes en nombre de principios como la SOBERANÍA DEL PUEBLO, LAS FORMAS REPUBLICANAS DE GOBIERNO, LA IGUALDAD CIVIL y la IGUALDAD POLÍTICA. En esa época, estos valores no eran necesariamente compartidos por todos los burgueses, ya que muchos reconocían y respetaban los principios de la sociedad monárquica y aristocrática, pero sí eran características de la sociedad burguesa. Las diferencias entre ambos universos –la sociedad monárquica y aristocrática, por un lado, y la sociedad burguesa, por otro- ocasionaron conflictos violentos, como lo demuestran las revoluciones y los cambios bruscos de regímenes y gobiernos que caracterizaron el período.
Estos movimientos violentos no tuvieron un éxito inmediato, aunque a largo plazo sentaban las bases de las formas contemporáneas de hacer y pensar la política y los valores sociales.
REVOLUCIÓN, DEMOCRACIA, REPÚBLICA, VOLUNTAD POPULAR, REPRESENTACIÓN NACIONAL, SUFRAGIO, IGUALDAD ANTE LA LEY: todos estos temas y prácticas de la política moderna se inauguraron de un modo confuso durante esos años agitados de la historia del mundo. También durante esos años se definieron las herramientas de una administración pública centralizada y uniforme, que otorgaba: mayor eficacia el papel del Estado; éste ya no descansaría en la figura personal del monarca, sino en un colectivo político y de identidad denominado ‘nación’.
En términos generales, todos estos cambios se asocian con la destrucción de la sociedad estamentaria, jerárquica y aristocrática, y con la formación de otro tipo de sociedad a la medida de los valores sociales y políticos de la burguesía moderna: por esta razón, el agitado período que se inició en 1789 y culminó en 1850 se conoce como el de las “REVOLUCIONES BURGUESAS”. Sin embargo, aunque en última instancia será su característica más importante, ninguno de los estallidos revolucionarios se agotó en esta dimensión ‘burguesa’: en estos levantamientos se mezclaron los reclamos de grupos populares (tanto urbanos como rurales)y las luchas entre grupos y facciones con distintas ideologías políticas, que no siempre se adaptaban a la calificación demasiado amplia de ‘burguesas’. Un ejemplo significativo de esto último son los reclamos específicos de los sectores obreros y el surgimiento de las primeras tendencias socialistas durante la primera mitad del siglo XIX.
REVOLUCIONES EN INGLATERRA, USA Y FRANCIA:
Durante gran parte del siglo XVII en Inglaterra, una serie de levantamientos armados terminó con las pretensiones absolutistas de los reyes de la dinastía Estuardo; en el año 1688, el príncipe holandés Guillermo de Orange derrocó Jacobo II Estuardo con el apoyo de los sectores burgueses y terratenientes ingleses. El nuevo res estableció un nuevo régimen monárquico, limitado por un PARLAMENTO controlado por estos poderosos grupos, y tuvo que jurar la DECLARACIÓN DE DERECHOS, que reconocía los derechos y las libertades políticas inglesas.
Casi un siglo más tarde, en 1776, LAS TRECE COLONIAS INGLESAS DE LA AMÉRICA DEL NORTE se negaron a seguir reconociendo la autoridad del monarca inglés, declararon su independencia y organizaron un gobierno sustentado en los principios de la soberanía del pueblo y de la igualdad entre los ciudadanos a partir de la forma republicana y federal. La lucha armada contra el ejército inglés terminó con el triunfo de las tropas americanas y el reconocimiento internacional de un nuevo país: los ESTADOS UNIDOS DE AMÉRICA. Los colonos fueron apoyados en su lucha por Francia y España.
Los cambios políticos en Inglaterra y en los Estados Unidos fueron muy importantes y tuvieron gran repercusión. Sin embargo, esta repercusión parece muy limitada si se la compara con la que alcanzó la Revolución Francesa. Lo que sucede es que, si bien el movimiento en Inglaterra alcanzó períodos de fuerte radicalización, finalmente terminó en una solución monárquica moderada, que nunca pretendió extenderse como modelo fuera de sus fronteras. Por su parte, Estados Unidos era aún una remota colonia, demasiado alejada del ‘centro del mundo’ como para poder provocar consecuencias generales. En cambio, FRANCIA ERA LA MONARQUÍA MÁS BRILLANTE Y PODEROSA DEL SIGLO XVIII, y estaba ubicada en el corazón de Europa Occidental. A este hecho se agregó después la expansión de su guerra revolucionaria (una verdadera lucha mesiánica en busca de la libertad de todos los hombres del mundo) por todos los rincones de Europa, desde Portugal hasta Rusia y desde Italia hasta el mar Báltico.
Las tropas francesas de Napoleón Bonaparte también desfilaron victoriosas por el norte de África e invadieron la península ibérica, hecho que tuvo como consecuencia directa el comienzo de las luchas por la independencia de las colonias españolas de América.
CONSIGNAS:
1-¿Cómo eran las sociedades europeas de 1789 y qué contradicciones tenían?
2-¿Quiénes y con qué principios impugnaron estas sociedades?
3-a)¿Por qué se habla de REVOLUCIONES BURGUESAS?; B)¿Por qué se afirma que las revoluciones "burguesas" no lo fueron tanto?
4-¿Qué principios defendía la revolución inglesa del siglo XVII?
5-¿Cómo se independizó EE.UU.?
6-¿Por qué fue tan importante la revolución que se dió en Francia?
7-Buscá breves biografías de: a)George Washington; b)Maximiliano Robespierre; c)Napoleón Bonaparte
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